jueves, 3 de junio de 2010

Primer capítulo...

Madrid, 31 de octubre de 2009

-Pasa, cariño, pasa, ¿quieres un té?.- preguntó mi vecina abriéndome de par en par la puerta de su casa.
Jamás había creído en la magia, pero nadie hubiera sido capaz de entrar en ese salón, con todas las paredes forradas de espejos, y no sentir algo especial por dentro. Había encendidas tantas velas blancas que parecía de día, aunque hacía ya bastantes horas que era de noche en la calle.
Mi vecina era un personaje muy peculiar, si la conociera Almodóvar seguro que escribiría un guión basándose en ella. Se llamaba Marifé, y nadie podría decir con exactitud qué edad tenía, vivía sola rodeada de gatos y de sus ventanas colgaban decenas de geranios, que le recordaban su Sevilla natal tanto como la ropa de colores vivos que llevaba siempre.
Acepté el té que me había ofrecido al entrar y me senté en una silla, contemplando atónita cómo tenía la mesa cubierta de pétalos de rosa y de unas pequeñas flores blancas. El día anterior me había hecho prometerle que iría a su casa a que me preparara uno de sus hechizos, que, según ella, me ayudaría a encontrar al amor de mi vida. Había aceptado. Era sábado y mi único plan para esa noche era comerme un enorme bote de helado sentada delante de la pantalla de la televisión, viendo una película de esas que tanto nos gustan a las treintañeras, esas en las que siempre hay una chica en apuros y un chico guapo que la ayuda y termina enamorándose de ella. Esas de las que cuando terminan nos dejan peor cuerpo del que teníamos antes de tomar la primera cucharada de helado. Al menos en su casa tendría compañía y gatos a los que acariciar.
Por cierto, me llamo Ana, tengo treinta y cuatro años y una vida social nula desde que me separé hace dos años y vine a vivir con mi hija a un pequeño piso del barrio de Lavapiés. En ella, y en lo que estaría haciendo ese fin de semana con su padre, pensaba precisamente cuando Marifé se acercó y dejó en la mesa una bandeja con dos tazas de té humeantes. Yo aparté la mía a un lado. No me gustan las bebidas calientes, ni siquiera en invierno, así que preferí esperar a que se enfriara. Ella se bebió el suyo casi de un trago y yo temí que se hubiera achicharrado el esófago. Me sonrió y me preguntó:
-¿Empezamos?
Asentí, dejé mi taza en una mesita pequeña que había al lado para evitar que se cayera (suelo ser bastante torpe) y la miré expectante. Cerró los ojos y comenzó a mezclar despacio los pétalos que había sobre la mesa, dejándolos resbalar por sus dedos llenos de enormes anillos.
-Al poder de las hadas y a las fuerzas de amor, pido que encuentres a la persona que haga danzar tu corazón.-dijo Marifé haciéndome dar un respingo en la silla.
Venga, haré un esfuerzo y me concentraré, ¿y si realmente funciona?
-Niña, coge del montón diez pétalos de rosa roja y diez pétalos de rosa blanca.- me dijo casi susurrando.
Evidentemente obedecí, no me creía nada de lo que estaba haciendo, pero sería mejor no tentar a la suerte. Cuando ya tenía los pétalos en la mano volvió a hablarme con la misma voz.
-Apriétalos fuerte en tu mano mientras cierras los ojos y te ves a ti misma sonriendo a un hombre que te tiene abrazada.
En eso no me costó demasiado obedecerla, era una visión que tenía más veces de las que me gustaría. Imaginé a un chico alto, delgado y de ojos verdes. No demasiado musculoso, nunca me han gustado los cachas de gimnasio. Al fin y al cabo era mi imaginación, ¿no? Ya que pedía, pedía en condiciones…
-¿Lo ves?.- preguntó Marifé.
Asentí sin hablar, manteniendo aún los ojos cerrados. Leche, la verdad es que al final me estaba contagiando su entusiasmo.
-Ahora abre los ojos y desmenuza en trozos muy pequeños los pétalos de rosa añadiendo estas flores de jazmín.- dijo tendiéndome tres flores blancas que olían de maravilla.
Sentí la suavidad de los pétalos entre mis dedos y el olor que desprendían. Aspiré fuertemente volviendo a cerrar los ojos, el aroma era cautivador. Al abrirlos no pude evitar ver mi reflejo en uno de los espejos y me sorprendí de verme a mí misma, algo especial debía haber en esa casa cuando me miré y me vi guapa, aún vistiendo un viejo chándal y con la melena recogida en una coleta.
-Bien, cariño. No dejes de visualizar en tu mente al hombre que has imaginado antes y envuelve la mezcla con cuidado en este pañuelo.- dijo con una sonrisa.
Me tenía tan ensimismada que si me hubiera dicho que hiciera dos mortales sin manos con los pétalos en ellas lo hubiera hecho, pero no me pidió tanto. Me dijo que envolviera la mezcla y cerrara el pañuelo con un hilo blanco, haciendo siete nudos.
-Espera.- dijo poniendo mi mano en la suya cuando vio que iba a hacerlo rápidamente.- Cada vez que hagas un nudo di con fe “Ven a mí”.
Volví a obedecer sumisamente y pronuncié esa frase las siete veces que me dijo. Le sonreí al terminar y ella me devolvió la sonrisa.
-El siete es el número mágico.- dijo mirándome fijamente a los ojos.- Lleva siempre esta bolsita cerca de ti y la magia irá siempre contigo. El día que encuentres a ese hombre de ojos verdes, deja que él la abra y aspirad el aroma los dos juntos.
-¿Eh? ¿Cómo sabías que lo había imaginado con los ojos verdes?.- le pregunté alucinada.
-Magia, cariño, magia….

9 comentarios:

  1. Hace unos días termine de leerme el libro, y no tengo palabras para describir lo mucho que me a gustado, de verdad me a EN-CAN-TA-DO!, me lo pase genial leyéndolo me a encantado los personajes, los diálogos, los lugares, los besos XD… a toda aquella gente que no lo haya leído, de verdad, se lo recomiendo al 100% les va a encantar y van a pasar un buen rato.

    PD: Cristina, ¿para cuando el próximo libro?:):)

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  2. ¡Muchas gracias! Estoy en ello, estoy en ello...jeje. Un besazo.

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  3. Hola Cris!!! la verdad es qe el primer capitulo me gusto mucho y me gustaria seguir leyendolo,solo que no se en donde y el problema es que soy del Estado de Veracruz y no se en donde puedo conseguirlo.
    La verdad muchas felicidades, el primer capitulo me engancho y quiero saber que mas pasa, jeje.
    Un bezo

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  4. Hola soy Copy, al igual tu soy super fan de Robert, me encanta lo que escribes pero como la persona del comentario anterior soy de México y aqui no se consigue tu libro, pordias publicar un poco mas de tu historia aqui en tu blog o dinos donde podemos leer algo mas. Te lo agradecere infiniamente. Saludos.

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  5. Querida Cris...me llamo Vanina vivo en Buenos Aires (Argentina)y me he llevado una sorpresa con tu libro...eres el fiel reflejo de mi sueño cumplido, pues lo hiciste realidad... te cuento que estudié periodismo y me gusta escribir desde que recuerdo...mis cuentos recaen solo en manos de mis amigas, siempre pienso que deben quedar allì en el anonimato. Creo que me estoy equivocando... debería despertarme de este letargo sueño y escribir!!!!! Rob, es en algún sentido, lo que me llevó a tomar la "pluma" de nuevo... el inspira amor... Saludos y bendiciones...y que lo tuyo llege lejos...hasta donde tú lo desees!

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  6. Querida Cristina, ¡como de identificada me siento contigo!. y cuanta envidia me das al saber que no te importa demostrar tu edad aun escribiendo este tipo de literatura. La edad claro está que no importa, pero influye ¿verdad? tanto para dar como para recibir. Si no de ahí tu sorpresa al saber la edad de tu muchacho artista de tu trailer. Yo todavía soy unos cuantos años mayor que tu, el número 4 etra en ellos, pero como ves aún no soy capaz de decir la mía con tal naturalidad.
    Yo también escribo, por supuesto, en plan aficionada, y hasta hace pocos meses no me atreví a sacarlo a la luz, de forma anonima por supuesto. Creo que me da vergüenza todo esto. ¿El que? Pues que sepan que me gusta escribir, aun no se si lo hago bien, mal o regular, que me tachen de ama de casa aburrida con ganas de algo mas, y sobre todo porque dirijo mis escritos a esa amplia gama de "adolescentes" entre comillas como ves, a quienes les gusta leer mis relatos y novelillas. Solo darte mis mas enhorabuenas por tu libro, te tengo envidia sana, pero envidia, ja, ja, por tu publicación y despedirme diciendo que mi "musa de la inspiración" tambien se llama Robert. Te invito a que leas algo en mi pequeño rinconcito
    http://quimerazayas.blogspot.com/, sobre todo la novela YO CULPABLE, que cuando lo hagas si tienes un ratito me dirás el porque te la menciono. No hace falta mas palabras de felicitacion y admiración, por lo que a partir de hoy tienes una nueva seguidora en tu blog.

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  7. ¡Muchísimas gracias por los comentarios! De momento, sólo está disponible a la venta en "papel" en España. Si van bien las ventas (tocaremos madera...), puede que también lo esté en más países. Tenéis también la opción de comprarlo como EBook, en la página web de El Corte Inglés.
    Zayas, voy a ponerme ahora mismo a leer lo tuyo, tiene muy buena pinta, gracias por compartirlo conmigo.
    Ah, y esta tarde voy a colgar algún otro capítulo... Un beso muy grande.

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  8. Zayas, no encuentro en tu blog ningún mail para contactar contigo, me gustaría preguntarte un par de cosas... ¿Podrías mandarme un mail a criscarr40@gmail.com? Gracias!

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  9. ZAyas: Cris,ya te deje mi dirección en un MP que acabo de mandarte. Gracias por tu visita y por tu tiempo. Nos comentamos, Abrazos.
    En estos momentos comento como anónimo pero soy Zayas de Quimera. Blogger hoy no me deja hacerlo con mi seudónimo.¡ para no variar !

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